I think that I should try to kill my ego (recomendado libros)
(‘Cause if I don’t my ego might kill me).
Hace unos meses, mi vida se siente como una seguidilla de actos rutinarios donde me desdibujo un poquito más todos los días. Me digo a mí misma que necesito leer otro libro, escuchar otro podcast, ver otra película o revisar de nuevo mis anotaciones para inspirarme y finalmente empezar. Con empezar me refiero a volver a escribir otra entrada en este joven newsletter, que todavía no tiene mucha forma ni propósito más que funcionar como un journaling un tanto pretensioso abierto a la mirada de terceros.
A veces toma el mando la Agustina poco pretenciosa, que es más de hacer que de pensar, y entonces me siento frente al teclado y, por unos minutos, escribo todo lo que se me ocurra, la mayoría de las veces con vergüenza y miedo y una sensación bastante incómoda en el estómago. Pero lo hago. (GET THINGS DONE)
Hoy lo que quiero hacer es una recomendación.
En otros newsletters y artículos (a veces para terceros), he recomendado sobre moda, comidas y, algunas veces, hasta películas (de forma descarada porque soy la persona menos cinéfila en el mundo). Pero nunca me atreví a recomendar libros; en mi mente, esa autoría solo la tienen editores y eruditos que devoran libros ávidamente con un privilegio que pocos pueden, como los que hicieron esta increíble lista de los mejores 100 libros del siglo XXI (que, para mi sorpresa, revisé y tristemente no he leído ninguno).
La cuestión es que hoy me siento acompañada de un aura de valentía especial que ha estado incandescente a mis espaldas y me ha perseguido estos días. Así que, de forma improvisada e irreverente, si tuviese que recomendar libros sin ningún pedido especial, mi sugerencia (repleta de subjetividad) se vería más o menos así:
1. Un cuento corto:
Las ruinas circulares
Jorge Luis Borges. 1940
“Nadie lo vio desembarcar en la unánime noche, nadie vio la canoa de bambú sumiéndose en el fango sagrado…”
Esas fueron las primeras palabras con las que descubrí a Borges en una clase de literatura de la secundaria (shout out para el profesor Bandéz) y que me hicieron prometerme a mí misma que nunca iba a dejar de leer porque simplemente no podía darme el lujo de no conocer. Me asombró todo lo que sabía Borges para poder escribir de esa manera; aspirar a ese nivel de conocimiento enciclopédico alguna vez fue mi meta.
Es mi favorito de "Ficciones": exótico, nostálgico, enigmático y lleno de propósito. Realismo mágico (pero del oscuro), idealismo, ciclos, dioses y ancestros; podría quedarme a vivir en este cuento. Ideal para leer en un día de lluvia.
2. Un libro para cuando no te encuentres:
Demian
Hermann Hesse. 1919
Cada vez que intentaba leer “El Lobo Estepario”, por algún motivo u otro lo terminaba dejando. Ese proceso se repitió unas cinco veces quizás, sin variar el resultado. Desistí con el título, pero insistí con el autor y, casi sin tener expectativas (pues estaba encaprichada con "El Lobo Estepario"), "Demian" se convirtió en uno de mis libros favoritos, con citas y diálogos que se quedaron pegados en mi cabeza.
Más de una vez me encontré siendo un poco como Sinclair, lo que me llevó a pensar que siempre hay alguien que está viviendo lo mismo que nosotros y, aunque no sepa quién, ni dónde, ni cuándo (o si sigue vivo o realmente existe), eso me hace sentir un poco menos sola y me reconforta. Cuando tengo que buscar fuerzas para seguir siendo una persona auténtica, pienso en esta cita:
“Yo había jugado a menudo con imágenes del futuro y soñado con papeles que me pudieran estar destinados, de poeta quizá, de profeta, de pintor o de cualquier otra cosa. Aquellas imágenes no valían nada. Yo no estaba en el mundo para escribir, predicar o pintar; ni yo ni nadie estaba para eso. Tales cosas sólo podían surgir marginalmente. La misión verdadera de cada uno era llegar a sí mismo. Se podía llegar a poeta o a loco, a profeta o a criminal; eso no era asunto de uno: a fin de cuentas, carecía de toda importancia. Lo que importaba era encontrar su propio destino, no un destino cualquiera, y vivirlo por completo.”
Autodescubrimiento, identidad y la búsqueda de la autenticidad. No recomendado para leer un domingo.
(Al día de la fecha sigo sin leer El Lobo Estepario)
3. Un libro que nunca pensé que iba a leer
El Enigma de Fermat
Simon Singh. 2015
Lo nombraron de pasada en algún podcast, lo anoté y fui a buscarlo a la biblioteca y, sorprendentemente, ahí estaba; de otra forma, creo que nunca lo habría encontrado.
De lo más bello que he leído este año. Mi campo no es para nada los números, pero a veces me gusta volver a encontrarme con la matemática porque la manera de ser perfecta en todas sus escalas siempre me asombra.
Aunque parece una historia sacada de película, es real. Un enigma sin resolver, un niño que sueña con poder ser quien lo descifre, colegas que ayudan, algún que otro drama en el medio, historia, genios, teoremas y muchos números, pero explicado de forma simple y entretenida.
4. Un título que me rompió el corazón
Cumbres Borrascosas
Emily Brontë. 1847
Heathcliff, el nombre del primer personaje ficticio que jamás voy a olvidar. Tengo pendiente releer este libro porque la primera y única vez que lo leí fue a los 16 años y me conmovió más de lo que pude entenderlo. Cuando lo leía, sentía cómo la venganza arruinaba a mi protagonista favorito y yo no podía hacer nada.
Estructura narrativa novedosa para la época, todos los personajes tienen un desarrollo increíble y, además, es un clásico. No puede dejar de leerse, pero terminarlo es peor que terminar "Orgullo y Prejuicio" y saber que no hay segunda parte.
5. Una recomendación apresurada:
A propósito de nada
Woody Allen. 2020
La autobiografía más entretenida que he leído hasta el momento, pero que sin embargo no he terminado (además, cuando buscaba todos los datos de este libro, me enteré que Woody Allen fue cancelado hace poco, así que no sé si es moralmente correcto hacer esta recomendación). Escritura prolija, pero cómica e irónica desde el primer párrafo. Un relato que recorre la escena artística estadounidense a mediados del siglo XX (sobre todo cine y TV) hasta nuestra actualidad en manos de este genio multifacético. Y ya no puedo decir más porque todavía no la termino, pero sé que ya la quiero recomendar.
Y hasta acá la lista. Si bien cinco recomendaciones puede parecer poco, tuve que hacer un esfuerzo mental bastante grande para tener una selección medianamente justificada de por qué deberían leer alguno de estos libros. Y ahora que lo pienso, quizá el tema de esta selección sea "destino y propósito", un tema que ha estado en mi cabeza estos últimos meses y que, por momentos, trato de volver a encaminar en mi vida. Así que tal vez de forma inconsciente esta lista sea un friendly reminder para mí también.
Espero que estas recomendaciones te inspiren, te hagan reflexionar, te entretengan o simplemente puedas encontrar algo valioso en ellos.
Enjoy,
Con cariño,
Agustina.
PD: Si leyeron alguno o piensan leerlo, espero sus opiniones y comentarios :)